
Hasta aquí, la definición no mostraría novedad alguna, de no ser por el hecho de que Cold Showers enriquece sus canciones con notables e inspiradas melodías y con la oscura, profunda y contenida voz de su cantante, Jonathan Weinberg. Quien, para el que guste de las curiosidades, también es el batería del grupo La Sera. Editado por el sello Dais Records, si nos centramos en “Love and Regret” nos encontraremos con ocho canciones, dos de las cuales (la estupenda “I Don’t Mind” y el pop tenso de “So I Can Grow”) se incluían en los maxis anteriormente citados como muestra del potencial del grupo. El resto de canciones del disco se construyen mediante claras e intensas guitarras (“BC”, “In Terms of Pleasure“), ritmos precisos (“New Dawn”) y gélidas atmósferas (“Violent Cries”), gruesos bajos (“Alights”, “Seminary”), puntuales sintetizadores y destacables muestras de personalidad tras las voces y coros.
El resultado es un álbum cuya intensidad acoge con naturalidad, vitalidad y acierto el lado más oscuro del pop. Por ello, Cold Showers obtienen buena nota en la iluminación de un tipo de expresión y sonido que nunca ha dejado de estar latente tras las cortinas de lo atrevidamente llamado underground._Publicado por Alfonso.